Ideal para pieles grasas y cabellos grasos o secos.
El aceite de macadamia es un aceite que, como su propio nombre indica, proviene del árbol de Macadamia (Macadamia integrifolia), cuyo fruto es la nuez. De hecho, está considerada como la reina de las nueces.
Posee gran concentración de vitaminas del grupo B. Destaca la vitamina B3 o niacina, la cual facilita los mecanismos de reparación de la piel ante agresiones externas como los rayos UVA. Gracias a su elevado contenido en proteínas, aporta elasticidad, brillo y firmeza a la piel.
Es uno de los frutos secos con mayor proporción en ácidos oleicos que existe, además de contener ácido palmitoleico (ácido graso omega 7), ácido linoleico y vitamina E. Una de las cosas que más llaman la atención del aceite de macadamia, es su poder de penetración, lo que le permite una rápida absorción sin dejar tacto graso o aceitoso.
MODO DE EMPLEO
Aplica unas gotas de aceite en las palmas de las manos, frotar y masajear suavemente la zona hasta su completa absorción.